Estos son los peores enemigos de tu auto en las calles
Las calles en mal estado se han convertido en uno de los peores enemigos de tu auto. ...
08/10/2019
Julio Alejandro Saldívar
Las calles en mal estado se han convertido en uno de los peores enemigos de tu auto. Los daños provocados por las irregulares carpetas asfálticas se reflejan en gastos extra como pueden ser neumáticos, amortiguadores, etc.
Por eso hoy te vamos a contar cuáles son estos enemigos que se encuentran en las calles, estacionamientos, clima y más. Trata de evitarlos y ahorrarás dinero.
Punzocortantes. Sin duda uno de los clásicos enemigos de tu auto, y del de cualquier persona son los elementos punzocortantes como los clavos, vidrios, madera, etc. Vale la pena ir muy atentos a estos elementos porque pueden resultar en problemas mayores. Hay que evitarlos a toda costa.
Lluvia química. Una de las muestras claras de que nuestro auto recibe lluvia química son esas manchas en la pintura y en los vidrios que parece que nunca se podrán quitar. La lluvia ácida o química se forma cuando la lluvia “regular” se mezcla con óxidos de nitrógeno, dióxido de azufre y algunas sustancias más. Es muy común en las zonas industriales y el estado estético de los autos cercanos lo deja en evidencia.
El sol. Otro de los principales responsables de que tu pintura pierda vida, de que la tapicería se empiece a deteriorar y pierda color, y de muchos otros males que sufren nuestros autos día con día, es culpa del sol y su potente luz y calor.
Baches. Aunque seas de los que maneja evitando los baches o pozos en todo momento, siempre habrá algún bache “camuflado” que te hará ver tu mala suerte. Nunca ten confíes de un bache cubierto de agua, puede ser muy profundo y dañar tu auto.
Topes y más topes. Uno de los peores inventos del hombre contra el auto son los topes, pero también son necesarios ante la falta de cultura vial de la gran mayoría de nosotros. Además de dañar tu auto, generan tráfico y contaminación.
Falta de educación vial. No solo se remite a cómo manejamos, sino también a detalles de cómo estacionamos y cómo tratamos al peatón, por ejemplo. Seamos considerados con los demás conductores y, sobre todo, con los que se desplazan a pie.