Ya sabes, para hacerte con un Ferrari California no basta con tener los 179,000 dólares con que la marca del cavallino ha tasado a su nuevo modelo. Tendrás que ponerte en una lista de espera de casi 6,000 miembros y esperar hasta 2011 para recibir tu convertible.
2,800 unidades se fabricarán en 2009 y 3,000 en 2010 no pueden hacer frente a las 6,000 ordenes de compra, algo que no inmuta a su presidente Luca di Montezemolo, quien ha reiterado que no piensa en modificar los planes de producción para incrementar la oferta de Californias.
Montezemolo también ha revelado que casi el 60 por ciento de los compradores del Ferrari California son nuevos clientes de la compañía y que la crisis financiera global –que parece no haber afectado al California- evitaría que muchas de esas compras se debieran a simples tentativas de especulación. Sin embargo, hay algo no nos entra en la cabeza señor presidente de Ferrari. Si hay crisis económica, ¿cómo puede haber tanto nuevo comprador?
En fin, dejemos a un lado las elucubraciones y disfrutemos de esta galería del Ferrari California en el Salón de París.
Superar lo aparentemente insuperable supone un reto sólo apto para los mejores. El nuevo California pone el listón muy alto en lo que a diversión suprema al volante respecta, pero además es el Ferrari más fácil de conducir jamás fabricado. Y también el de mayor carga tecnológica. Y todo ello, sin menoscabo de la deportividad y la emoción intrínsecas a cualquier modelo de la firma de Maranello. Esta vez, sí que se han superado: el California parece magia.