Mazda entró hace poco más de quince años en la pugna por la atención de las familias numerosas, con su primer modelo de tres filas de asientos, el Mazda CX-9. La competencia en este segmento de SUV medianos es brutal, sobre todo luego de la llegada de los más novatos, el Kia Telluride y el Hyundai Palisade, que han ascendido vertiginosamente en la escala de las preferencias.
Con atributos como un lujoso interior y su excelente compostura en la carretera, el CX-9 de Mazda sobresale entre la competencia, pero la amplitud de las filas posteriores de asientos y el área de carga juegan en su contra. Tanto así, que quizás este sea el último año en que tengamos este modelo entre nosotros.
Mazda produce vehículos hermosos y pocos se atreven a poner en duda esta aserción. El CX-9 no es excepción. Es quizás uno de los SUV medianos de mejor talante en la actualidad.
Muchos fabricantes han adoptado las formas más voluminosas y cuadradas de las camionetas, para hacer parecer a sus SUV más robustos de lo que en realidad son. Sin embargo, Mazda sigue apegada a diseños con plasticidad y fluidez, donde abundan las curvas y los pliegues suaves.
El CX-9 entra por los ojos, y en el interior no decepciona, de no ser por su espacio. Mazda hace tiempo que destella por la calidad de sus interiores, y este SUV es una buena muestra. Materiales de alta calidad y un diseño elegante (aunque con pequeños detalles que comienzan a delatar antigüedad) contribuyen a dotar al 2023 Mazda CX-9 de uno de los interiores más lujosos entre los SUV medianos. Los acabados más altos pueden incluso incursionar en el territorio de competidores de lujo.
El cuero Nappa y la madera de poro abierto denominada “Santos Rosewood”, en el modelo Signature de gama alta, son buenos exponentes de lo que afirmamos.
Donde el interior del Mazda CX-9 queda algo rezagado es en su aforo. No es un SUV pequeño, pero la mayoría en su categoría le aventaja. La tercera fila de asientos es un lugar poco apetecible para adultos en este tipo de SUV, pero en el CX-9, además del difícil acceso, las dimensiones son muy restringidas. Dispone de 35,4 pulgadas (89 centímetros) de altura y 29,7 pulgadas (75 centímetros) para estirar las piernas allí.
Otro tanto sucede con el espacio para llevar carga. El CX-9 solo dispone de 14.4 pies cúbicos para estos menesteres, mucho menos que un Ford Explorer con 18.2 o un Chevrolet Traverse con 23.
Esta escasez de espacio posiblemente pronto sea cosa del pasado, pues el 2023 parece ser el último año donde veremos un nuevo Mazda CX-9. Mazda presentará en breve el flamante CX-90 de tres filas de asientos, que se convertirá en el buque insignia de la marca, y será una interpretación ligeramente más espaciosa y robusta del CX-9.
Mazda presenta una distribución muy generosa de las prestaciones de seguridad en el CX-9. Todo lo esencial viene incluido de serie, y solo dejan para agregar con costo adicional la proyección en el parabrisas o HUD, reconocimiento de señales de tránsito, sensores de estacionamiento, sistema de cámaras en 360 grados o el frenado automático de emergencia en reversa.
Este fabricante no es fan de las pantallas táctiles, y aduce que pueden distraer la atención de la carretera. El razonamiento es válido, pero la curva de aprendizaje para masterizar el mando giratorio y los botones adicionales en la consola central para operar el info entretenimiento es prolongada aquí. Luego de un tiempo resulta bastante intuitiva, y ayuda que los gráficos son sencillos y bien diseñados. Funciones de serie incluyen una pantalla de 10,25 pulgadas con Android Auto y Apple CarPlay, un punto de acceso Wi-Fi, carga inalámbrica de teléfonos, y radio digital.
Como sucede con los diseños atractivos de sus autos, Mazda también descollar por el atractivo de sus modelos al momento de conducirlos. Aunque pueda parecer algo absoluto, me arriesgaría a afirmar que no hay otro crossover que iguale o supere su dinámica de manejo.
El motor del Mazda CX-9 es pequeño pero potente. Cuando se utiliza combustible de 93 octanos logra 250 caballos de potencia, bajando a 227 con gas regular o de 87 octanos, algo menos que sus contrincantes en la clase. La aceleración tiene buenos bríos, y su habilidad para abordar curvas con vigor está garantizada, algo poco común en vehículos de estas dimensiones.
A pesar de tener menos potencia que la competencia, el CX-9 no se siente lento en la ciudad, gracias a un par de torsión máximo en las 2.000 revoluciones por minuto. Ese empuje se esfuma cuando subes de esta marca, por lo que adelantar en la autopista puede que requiera de alguna planificación.
El CX-9 es también más eficiente en consumo de combustible que algunos de sus rivales. Rinde 20 mpg (millas por galón) en la ciudad, y 26 en carretera, que son 11.76 o 9.05 litros por cada 100 kilómetros. A diferencia de algunos de sus rivales, el CX-9 solo está disponible con tracción a las cuatro ruedas, pues desde el año pasado, la marca japonesa generalizó la tracción total, eliminando la opción de tracción delantera.
El Mazda CX-9 2023 está disponible en cinco acabados: Touring, Touring Plus, Carbon Edition, Grand Touring y Signature. Todos los modelos cuentan con un motor turbo de cuatro cilindros y tracción total.
Los modelos de entrada suelen ser algo más caros que los de la competencia, pero el Mazda justifica el mayor coste, incluyendo más equipamiento de serie, sobre todo de seguridad. El más económico CX-9 Touring comienza en los $38,750.
En el otro extremo, los Grand Touring y Signature por $45,640 y $48,460 respectivamente, parecen más atractivos al compararlos con otros competidores, sobre todo por sus interiores, que emulan con éxito los habitáculos de clase de lujo, gracias a los excelentes materiales, el acabado inmaculado y un diseño limpio y elegante.
En nuestra opinión, la mejor elección de las cinco opciones sería el Carbon Edition de nivel medio por $44,780. Este modelo incorpora asientos de capitán con calefacción en la segunda fila, puertos USB en la tercera fila, un excelente sistema de audio Bose de 12 altavoces, volante con calefacción (algo que aprecio mucho en el invierno) y faros adaptativos que iluminan las carreteras con curvas En la lista de competidores encontramos a los Kia Sorento o Telluride, Hyundai Palisade, Nissan Pathfinder, Honda Pilot, Toyota Highlander o Chevrolet Traverse por mencionar solo algunos.
El CX-9 es un vehículo cuidadosamente diseñado y muy bien elaborado, que en su contra tiene una larga lista de SUV crossovers, algunos con atributos llamativos. Mazda colocará un 0 al final de su nomenclatura para convertirlo en el CX-90, un SUV también de tres filas, con innovaciones como una nueva línea de motores, y por supuesto, algo más de espacio para esa tercera fila. Para las familias no tan numerosas en busca de un buen transporte que aventaje a algunos en la competencia por su precio, aun el Mazda CX-9 2023 puede que sea una buena opción, sobre todo luego de mitad de este año, cuando seguramente los incentivos para adquirirlo puede que abaraten incluso más su costo.
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Es un periodista independiente, miembro de NAHJ, la Asociación nacional de periodistas Hispanos y de NWAPA, la Asociación de periodistas automovilísticos del noroeste. Los vehículos son proporcionados por los fabricantes como préstamo por una semana para fines de la reseña. De ninguna manera, los fabricantes controlan el contenido de los comentarios.
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