Javier Fueyo

El conglomerado chino-japonés, National Electric Vehicle Sweden (NEVS), adquirió los activos físicos de la compañía, incluyendo su fábrica en Trollhättan, pero parece que cometieron  un error de principiante, pues no aseguró los derechos para usar el nombre o el logo de Saab.

Saab es uno de los fabricantes suecos más reconocidos a nivel mundial, por lo que este pequeño obstáculo puede ser un problema importante para los nuevos propietarios que perderían uno de los activos más importantes de la marca, su imagen.

Truckmaker Scania mantiene los derechos y tendrá que acceder para que NEVS los emplee, esto de acuerdo con declaraciones oficiales de la compañía. Actualmente, los grupos siguen en negociaciones.

Saab fue fundada hace casi 65 años y hace un mes fue comprada debido a la bancarrota. El nuevo grupo propietario, liderado por el ex-ejecutivo de Volvo Karl-Erling Trogen, está planeando convertir a la compañía en un fabricante de vehículos eléctricos y espera lanzar su primer modelo hacia mediados del 2014.