Javier Fueyo

En fechas recientes, representantes de las Fuerzas Armadas de EEUU revelaron nuevos detalles acerca de un prototipo de super-tanque desarrollado para sustituir a los actuales vehículos blindados. Todos los tanques son masivos, ésa es su naturaleza, pero el nuevo prototipo del ejército estadounidense sólo puede ser descrito como titánico. Nos referimos al GCV (Ground Combat Vehicle), super-tanque con un peso de 84 toneladas que sustituirá al BFV (Bradley Fighting Vehicle).

Sin embargo, el GCV no sólo fue diseñado para transportar un grupo de 9 tripulantes, sino también para soportar dispositivos explosivos improvisados, una de las mayores amenazas para las fuerzas armadas mientras combaten en territorios hostiles. Por otro lado, al brindar mayor espacio en el interior, los soldados tienen mejores oportunidades de supervivencia en comparación a las que ofrece el Bradley Fighting Vehicle. El espacio adicional permite distribuir la presión de las explosiones y reducir el impacto.

El GCV vendrá armado con un cañon de 30 mm, probablamente el Mk44 Bushmaster II, aunque esa información será confirmada cuando el desarrollo del tanque haya finalizado. Aunque se sabe que el GCV tiene un motor más poderoso que su predecesor, aún se desconocen sus características. El Pentágono otorgará el primer contrato para manufactura de GCVs en 2019.