Julio Alejandro Saldívar

Hace algunos años, Daniel Soriano y dos colegas más presentaron el Ferrari Aliante como parte de su tesis, sin embargo, Soriano ha retomado el tema y ha hecho algunos ligeros ajustes.

A pesar de que Ferrari es uno de los fabricantes que hace los autos más atractivos, el Aliante es una muestra de que por ahí les quedan algunas opciones vacantes.

Daniel Soriano impulsó su proyecto para que formara parte del Ferrari World Design Contest de 2001, pero es hasta ahora que ha decidió darle los toques finales y el resultado es increíble.

Lo primero que se observa es un exterior que gira las cabezas de todos los que anden cera. Al frente presume dos juegos ópticos triangulares, tomas de aire y difusor en color negro.

La “nariz” del auto está casi pegada al piso y el terminado en negro mate es uno más de los aciertos de Soriano.

Otro de los elementos que nos encantan es el parabrisas de una sola pieza, que además ha sido colocado en un ángulo súper agresivo.

La parte trasera, aunque perfectamente bien lograda, puede parecer la de un Ferrari “más”. Sin embargo, los pasos de rueda son muy anchos y le confieren un estilo bastante “caderón”.

Y como la “cereza del pastel” está la cubierta del motor (en posición central), que gracias a su transparencia deja a la vista el increíble 12 cilindros “flat”.

Al interior las cosas siguen en el mismo tenor. Una serie de indicadores clásicos le dan un carácter muy especial. También destaca una palanca de cambios “manual” y los asientos de “cubo”.

Daniel Soriano ha trabajado para marcas como Polestar; Volvo Cars, Lamborghini y más.