Hyperion: la obra póstuma de Andrea Pininfarina

La obra póstuma de Andrea Pininfarina, por fin, ha sido mostrada. El Hyperion –nombre de un titán ...
18/08/2008

Javier Fueyo

Si a una parrilla característica de Rolls Royce la acoplas a un capó largísimo sustentado por unos descomunales pasos de rueda descomunales que envuelven unos rines poderosos el resultado es el Hyperion, la realización póstuma de Andrea Pininfarina.

El exclusivo Hyperion es un un encargo realizado por el millonario Ronald Hall, coleccionista de autos que entre sus propiedades cuenta con un Rolls Royce Drophead coupe. No es la primera vez que Pininfarina acepta un encargo de este tipo. Anteriormente el P4/5 y el Scaglietti K fueron concebidos para satisfacer los caprichos de excentricos coleccionista.


Único y genuino
El Hyperion es único, no sólo porque vaya a haber, a priori, uno. También porque en su concepción la naútica ha tenido un papel fundamental. Las puertas de madera han sido fabricadas en exclusiva por artesanos de barcos especializados en botes de lujo. La cubierta de madera en la que se guarda la capota de lona, también.

Asimismo, las técnicas utilizadas en su manufactura y en su diseño no tienen parangón en los autos de producción en serie. Los elementos con que cuenta tampoco. Fibra de carbono de Fraschini, cristales Isoclima, luces Triom y rines de metal Fondmetal son algunos de los ejemplos.

En el interior, un detalle que lo hace aún más original. El reloj realizado por Girard Perregaux en exclusiva para el Hyperion. Puede ser desmontado del cuadro de instrumentos y ser puesto en la mano de su propietario mediante un brazalete que lleva incorporado. Es el único elemento diferente al del Drophead.

Soluciones de diseño
El Hyperion desciende, como hemos comentado, de un Rolls Royce Drophead coupe. Sin embargo, es un roadster biplaza. Para esa transformación, además de trabajar sobre el chasis del vehículo, el asiento fue retrasado 40 centímetros y las plazas traseras retiradas.

El objetivo de esa metamorfosis no ha sido otro que hacer del Hyperion una revisitación de los clásicos del periodo de entreguerras: autos con una zaga muy corta y un descomunal capó. Para compensar el desigual reparto de masas, el trabajo de los ingenieros de Pininfarina ha sido profuso. Primero, la tradicional parrilla Rolls ha sido inclinada levemente, de manera que cuenta con una forma trapezoidal que ayuda a mejorar la aerodinámica del auto. Otro elemento que ayudan a repartir los pesos es la pequeña prominencia que desde la puerta delantera se extiende de manera perpendicular al suelo hasta terminar en la rueda trasera.

Relacionadas

La obra póstuma de Andrea Pininfarina, el Hyperion, ha sido puesto a la venta por su propietario, el multimillonario Roland Hall, a un precio de 4,5 millones de euros (casi 6 millones de dólares). Se trata del único ejemplar fabricado de este modelo, historia viva de la automoción.

Hace 15 años

Después de que terminen sus contratos de fabricación en el año 2011, Pininfarina, que se dedica a construir autos de otros fabricantes en sus instalaciones, tomará otro rumbo en el proceso de volver a registrar números negros, tras ser salvada de la bancarrota.

Hace 15 años