Jose Carlos De Mier - @GPSmediaexperts

¿Quién necesita un Convertible? Pregunté convulsivamente a mis colegas periodistas presentes en la cuarta edición del Topless in Miami, la prueba de convertibles más relevante de la Costa Este de USA (17 autos de distintos tamaños y presupuestos a prueba durante 12 pujantes horas). La mayoría coincide en que es un lujo, algo innecesario pero tremendamente beneficioso para el espíritu. Como dice un buen amigo, “el dinero no da la felicidad pero no conozco a nadie que tenga una colección de convertibles y sea infeliz”.

Dicho esto, en la búsqueda de la felicidad material es imprescindible invertir algo de esfuerzo y muchas veces una buena cantidad de dinero. Por eso, con el resto del equipo de editores nos pusimos manos a la obra para encontrar el “índice de la felicidad”. En realidad lo mejor que se nos ocurrió fue calcular el costo por caballo de fuerza de los 17 autos que teníamos a nuestra disposición.

No hubo grandes sorpresas. El deportivo del pueblo también es el convertible del pueblo. Por 112 dólares el caballo de fuerza no hay con que competirle al Ford Mustang GT. Bueno, si eres de los de Chevrolet seguro que encuentras la manera de convencer a tu pareja de que 120 dólares por caballo no son una diferencia significativa.

Si eres de los que te mueves en el estrato superior, prepara alrededor de 400 dólares por caballo para hacerte con el espectacular 911 Turbo S. Si te enamoraste del azul cielo del Continental GT estás en problemas: necesitarías 482 dólares por caballo para hacer frente al cuarto de millón que te va a costar este capricho. Seguro que si te lo puedes permitir estarás en nuestra listas de conductores felices.