Tengo amigos que les gusta “inspeccionar” algunos de los autos que pruebo. No se interesan por un Hyundai Sonata o un Toyota Corolla, pero esta semana mi lista de visitantes ha sido amplia. A todos los he deslumbrado, sentándose primero en el asiento trasero del 2023 BMW i7 xDrive60, y desplegando la descomunal pantalla de 31 pulgadas y definición 8K para mirar algún video.
¡Madre mía!, ¿Pero esto qué es?, ¡Dios mío!, ¿Qué? Han sido las expresiones más frecuentes que he escuchado de mis invitados, ante el derroche no sólo de la pantalla, sino del lujo interior y la comodidad de este BMW.
El i7 es básicamente la versión eléctrica del BMW Serie 7, y como explica el fabricante, “el i7 eléctrico es un Serie 7, independientemente de su tren motor”.
Esta semana he tenido la oportunidad de embelesar a mis amigos, pero no creo exagerar si afirmo que, también, hemos disfrutado la oportunidad de mirar al futuro de los autos de lujo, a través del lente del 2023 BMW i7 xDrive60.
El i7 del 2023 es completamente nuevo este año, y sirve como buque insignia de la creciente submarca “i” de vehículos eléctricos de BMW.
Ciertamente, el BMW i7 xDrive60 no es un auto apuesto. Al frente predomina la enorme parrilla en forma de riñón o lo que a usted mejor le parezca. Este diseño ha sido bastante vilipendiado por quienes aseguran semeja un Angry Birds o quizá un castor enojado. Con esta parrilla sucederá como con la de Lexus, pues “con el paso del tiempo, la costumbre se hace ley”.
Aquí, por suerte, los nuevos elementos de iluminación están compuestos por una configuración de faros en dos niveles, que emblandece en algo la apariencia frontal.
Las proporciones del i7 son voluminosas pero desaprovechadas en materia de diseño. A pesar de estar construido sobre una nueva plataforma más flexible, que puede acomodar motores de combustión o eléctricos, los diseñadores de BMW optaron por la vía convencional. Al lado de las formas únicas de otros diseños totalmente eléctricos como el Polestar 2, Audi e-tron GT, Lucid Air o el Hyundai Ionic 6 por mencionar algunos, el 2023 BMW i7 xDrive60 resulta un poco aburrido, casi anticuado.
Como dice una abuela animando a su nieta que viene a casa con un novio no muy agraciado: “la verdadera belleza está por dentro mi hija”.
En el i7 la belleza interior se manifiesta refulgente, casi perfecta. Hay tanto detalle en qué reparar, desde el abundante uso de cristal o imitación de altísima calidad, fibra de carbono, piel fina y suave al tacto o la lana de gran calidad.
Combinan lujo con tecnología de forma magistral, y aunque al principio se requiera de cierto tiempo para descubrir opciones tales como puertas que se abren o cierran sin tirarlas o controles algo ocultos como los de las ventanillas de ventilación, una vez aprendido el camino, solo queda disfrutar de uno de los interiores más lujosos que hayamos examinado.
Hay bastante aquí de Rolls-Royce y no extraña que así sea, pues la opulenta marca es desde hace 20 años una subsidiaria de BMW. Ciertamente, las series 7 y 8 del fabricante alemán han mantenido durante mucho tiempo el lugar como la máxima expresión de lujo de la marca.
Cualquier artefacto tecnológico en el 2023 NMW i7 se verá eclipsado por la gigantesca pantalla de 31 pulgadas y definición 8k, que se despliega desde el techo para los pasajeros de la segunda fila de asientos. Incluye Amazon Fire TV con Hulu, Netflix y YouTube, así como una conexión 5G de alta velocidad. Para controlarla hay a disposición de los pasajeros dos pequeñas pantallas de 5,5 pulgadas en los paneles de las puertas, donde también se puede cambiar la climatización, la posición de los asientos e incluso la música en todo el vehículo.
Para evitar que otros conductores se distraigan mirando el “cine rodante” dentro del i7, BMW ha programado las pantallas de las ventanillas y la cortinilla del techo de cristal con iluminación LED, para que desciendan cuando se baja la gran pantalla.
Mientras que abundan las pantallas, los botones son escasos en esta cabina. La del conductor de 12,3 pulgadas y la del info entretenimiento de 14.9 se encuentran tras un cristal curvado continuo para aparentar una sola pantalla. Todo es controlado a través del iDrive 8 de BMW o del sistema de reconocimiento de voz. El sistema está bien diseñado, pero hay demasiadas opciones escondidas tras cascadas de menús, el clásico problema de los autos que no proveen botones físicos ni para el masaje de los asientos.
El BMW i7 Incluye de serie varias funciones de asistencia al conductor y, opcionalmente, tecnología más avanzadas disponibles como el modo de conducción de manos libres para su uso en carretera y un sistema de aparcamiento asistido que permite al conductor salir del vehículo y aparcar el coche a través de una aplicación en el teléfono inteligente.
El i7 utiliza un sistema de propulsión eléctrico similar al del nuevo SUV EV de la marca, el iX. Son dos motores eléctricos -uno en cada eje- que generan una potencia combinada de 536 caballos. La tracción total es de serie y la aceleración es rápida para un vehículo tan grande y pesado. Recorre las 60 millas o 100 kilómetros en 4.3 segundos, arrastrando una “masa corporal” de casi 6,000 libras o 2,683 kilogramos.
Cierto que BMW ha calado con su moto de “Ultimate Driving Machine”, el eslogan que lo distingue como una marca que los amantes a la buena conducción favorecen, pero en el caso del i7 quizá queden algo decepcionados.
La conducción es ágil para un sedán tan grande, pero, aun así, el i7 no atraerá a compradores que busquen un comportamiento deportivo, y no lo necesita hacer. Las comodidades aquí encontradas, que incluyen la función opcional “Executive Lounge” para el asiento trasero y masaje en todos los asientos, merecen una conducción especialmente suave y un habitáculo silencioso.
El alcance no decepciona, pero tampoco es de los mejores, quedando por debajo de Teslas o Lucid similares. Según el tamaño de los neumáticos, el 2023 i7 puede recorrer entre 296 a 318 millas, unos 476 a 511 kilómetros.
La decisión es fácil, pues el BMW i7 2023 sólo está disponible en un nivel de acabado: el i7 xDrive60. Los paquetes adicionales son más variados e incorporan un precio adicional sobre los $119,300 de precio básico, llevando al i7 cerca de los $152,000. Notemos que, por el precio básico, el i7 viene equipado con notables características de serie como la tapicería de cuero Merino, un estéreo con sonido envolvente Bowers & Wilkins de 18 altavoces, carga inalámbrica de dispositivos, entre otros tantos.
El Mercedes-Benz EQS eléctrico o un Tesla S pueden considerarse directos competidores. En la categoría de autos eléctricos de lujo también podríamos incluir al Audi e-tron GT o el Polestar 2.
Casi todos los amigos o vecinos curiosos que senté en el asiento trasero equipado con el paquete Executive Lounge Seating, llegaron a la misma conclusión: Aquí se puede vivir.
Es que tanta comodidad y lujo enamoran, y el 2023 BMW i7 es un galán indiscutible, que lleva la opulencia del lujo al máximo, aprovechando las ventajas del silencio que proporciona la electrificación y sí; cuesta casi como una casa.
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Roger Rivero
Es un periodista independiente, miembro de NAHJ, la Asociación nacional de periodistas Hispanos y de NWAPA, la Asociación de periodistas automovilísticos del noroeste. Los vehículos son proporcionados por los fabricantes como préstamo por una semana para fines de la reseña. De ninguna manera, los fabricantes controlan el contenido de los comentarios.
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